Corriente desconectado

En esta obra, las fases de la luna—creciente, menguante y plena—se entrelazan con una corriente de agua que fluye de manera independiente, simbolizando un desajuste entre nuestra intuición y nuestras emociones. Aunque el agua refleja nuestras emociones, parece estar separada de la influencia lunar, sugiriendo una desconexión que puede sentirse incómoda o inusual. Este contraste invita al observador a reflexionar sobre esos momentos en los que nuestra intuición y emociones no están en armonía, destacando la importancia de realinearlas para navegar la vida con mayor claridad. El flujo de energía que atraviesa la luna menguante sugiere que la conexión está siempre presente, esperando ser reconocida y restaurada.